Un jardín secreto de gran belleza
La elección de un alojamiento en el distrito prodigioso de Horta facilita el acceso a los importantes parques de Barcelona, como el de Guëll. Sin embargo, el lugar más simbólico de este barrio es el Parque del Laberinto. Este jardín íntimo parece tan indescriptiblemente bello que quedará sorprendido al verlo.
En nueve hectáreas de vegetación, diviértase descubriendo pequeños templos, estatuas y columnas. Este paseo será una oportunidad para descubrir una parte de la historia de
Barcelona en un entorno muy lúdico. Prepare su cámara para inmortalizar la estatua de Eros que se encuentra en el centro del laberinto.
Al final del viaje, diríjase a la terraza para disfrutar de unas magníficas vistas del jardín. Una vez más, le sorprenderán las estatuas que representan ciertas deidades de la mitología griega como Artemisa o Dánae. Finalmente, no pase por alto el suntuoso pabellón de Carlos embellecido por la fuente de la ninfa Egeria.
Un fascinante recorrido por Barcelona
Además del Parque Guëll y el laberinto de Horta, hay infinitos
sitios para explorar en Barcelona. Después de aprovechar al máximo la calma de este lugar, podrá recorrer los monumentos de la ciudad, maravillas culturales entre las que se encuentran: la famosa Sagrada Familia, el Museo de Gaudí y la Casa Batlló. Ribera y el Museo Picasso tampoco pueden faltar en este recorrido.