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Lejos de la atmósfera cargada de las grandes ciudades, la Isla de Ré ofrece muchos paisajes excepcionales compuestos de dunas, playas de arena, pantanos, viñedos y reservas naturales. En la autenticidad reside el principal encanto de la isla. ¿Se anima a descubrirlo?
Este lugar que se encuentra al norte de Isla de Ré, se extiende sobre 120 hectáreas, y es conocido por sus marismas, se donde se encuentra la reserva natural de Lilleau des Niges. Es el hogar de muchas especies de aves migratorias, principalmente de los países nórdicos. No olvide visitar el museo dedicado a la historia de las marismas que presenta la profesión del salinero. Esta reserva encantará a los amantes de la ornitología. De hecho, Île de Ré es un lugar famoso por la observación de aves, ¡no se vaya sin observar algunas especies que le sorprenderán!
Debe saber que durante su caminata (a pie o en bicicleta), disfrutará de unas vistas increíbles para observar la fauna y la flora que se encontrará a su alrededor.
Aquí se juntan burros, mulas y caballos de la raza poitevin. Durante mucho tiempo han estado en peligro de extinción, pero en el recinto de la montaña se puede admirar más de cerca a estos animales encantadores y adorables. A los niños les gustará especialmente esta visita porque tendrán la oportunidad de tocar a los animales y ver el entorno natural.
Horarios y días de apertura:
> Del 1 de abril al 30 de septiembre: abierto todos los días de 10:00 a 12:00h y de 14:00 a 18:00h
> Del 1 de octubre al 31 de octubre: abierto los sábados y domingos, y el resto de la semana con reserva previa (excepto durante las vacaciones escolares de la Zona A: todos los días de 10:00 a 12:00h y de 14:00 a 18:00h).
> Del 6 de noviembre al 22 de diciembre: con reserva, durante la semana (excepto durante las vacaciones escolares en la zona A: todos los días de 10:00 a 12:00h y de 14:00 a 18:00h).
CIERRE ANUAL: 23 DE DICIEMBRE DE 2017 AL 7 DE ENERO DE 2018
Podrá admirar una naturaleza salvaje e inédita en el corazón de estas 10 hectáreas. Además, tendrá la oportunidad de pasear en botes, en bicicleta o a pie. ¡Descubra la flora y la fauna local en un entorno excepcional, en familia o con amigos!
Este ecomuseo situado en Loix presenta la historia de la salicultura y las marismas a través de visitas guiadas a través de las cuales conocerá la historia del oro blanco que una vez fue la riqueza de la isla de Ré.
Toda la tradición de la cultura de la sal en la isla de Ré se revela en el museo, antes de salir a descubrir una marisma en activo. Descubra la técnica de producción de la sal, el funcionamiento de un pantano y la fauna y la flora que se encuentran en las marismas.
Con sus 100 km de costa, la Isla de Ré cuenta con algunas de las playas de arena más bellas de la costa atlántica. Si quiere nadar, debe saber que las playas más populares se encuentran al sur de la isla (La Couarde-sur-Mer, Bois-Plage-en-Ré), protegidas de los vientos dominantes.
Mientras que las playas salvajes y auténticas del oeste (Saint-Clément) como la Conche des baleines atrae a pescadores y amantes del vuelo sin motor. Este lugar está bordeado por el bosque de Lizay y las dunas, por lo que es perfecto si lo que buscar es caminar rodeado de un paisaje único.
Los viñedos son una parte esencial del paisaje de la Isla de Ré, ya que ocupan una gran parte de su superficie. La industria del vino fue importada por los monjes en el siglo XII, quienes supieron identificar que este destino, con gran variedad de suelos y un clima idóneo, contaba con las condiciones propicias para la explotación de la vid.
Hoy en día, los viñedos y la agricultura están estrechamente ligados, ya que las cosechas están destinadas a la producción de vinos. Entre los productos que no debe perderse se encuentran el Rosé des Dunes y el pineau Ilrhéa. Acompañe la cocina típica del lugar con esta bebida que le dejará un buen sabor de boca. Y, sobre todo, admire el paisaje tan característico que dibujan los viñedos y el cuidado que le dan los trabajadores de la tierra.
Más que un estilo de vida, ir en bicicleta por la Isla de Ré es algo muy popular por ser un medio de transporte ecológico. Son 110 kilómetros de carriles bici los que conectan los 10 pueblos de la Isla de Ré de norte a sur.
Además, pasear en bicicleta es la mejor manera de descubrir la riqueza del campo y la diversidad de paisajes. Sea cual sea su presupuesto y sus preferencias (bicicleta de ciudad, bicicleta de montaña, tándem, bicicleta eléctrica ...), encontrará una amplia variedad de empresas de alquiler de bicicletas en los diferentes pueblos. ¡Disfrute del lugar sobre dos ruedas!
