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Ibiza, "Eivissa" en catalán, es la más grande de las Islas Pitiusas, situada en el corazón del archipiélago balear. A lo largo de su historia, Ibiza ha sido tanto un objetivo como una base de piratas. Así, conocer la historia de la isla de Ibiza le permitirá apreciar aún más la belleza de la misma y comprender sus particularidades.
La isla pertenecía a los romanos y esto se ve reflejado actualmente en la arquitectura de la isla. La riqueza de este lugar proviene del hecho de que la isla estuvo bajo varias influencias estos años, incluida la del Imperio bizantino, como lo demuestra la iglesia de Santa Inés. Su ubicación ideal en el mar Mediterráneo la convertía en un blanco perfecto para los ataques.
Este periodo es, sin duda, el más fascinante. Se trata de la época en la cual los musulmanes gobernaron la isla, que pasó a llamarse Yebisah. Algunas murallas de la ciudad aún son testigos de esta influencia en Dalt Vila.
Aquí tuvo lugar la reconquista cristiana de la isla por los catalanes, que luego tomó el nombre de Eivissa. Las mezquitas se convirtieron en catedrales y los lugares públicos y los más importantes de la isla fueron cambiados de nombre, como Sant Josep.
Esta es la edad de oro de la ciudad que experimentó un impresionante período de prosperidad. Fue, una vez más, víctima de saqueos por parte de los piratas. Algunas de las canciones típicas de la isla cuentan cómo estos piratas robaron las riquezas de la región: las mujeres y el ganado.
Ibiza recibe el título de ciudad y se crea el municipio de Baleares.
