Protegido por sus murallas,
Essaouira esconde maravillas que podrá descubrir. Esta ciudad blanca ubicada en una península rocosa, todavía conserva las huellas de un pasado histórico. Al visitarla, tendrá la impresión de que fue delicadamente colocada en estos acantilados, destinados a brillar desde la costa. Mientras pasea por sus callejones, descubrirá su
kasbah, el distrito fortificado también llamado el "distrito del rey". Desde aquí se podrá adentrar en la medina, repleta de la conocida artesanía marroquí.
En el corazón de esta vibrante ciudad tiene lugar el festival anual de música, en el que los Gnaoua son protagonistas. A los niños les encanta este destino porque las playas ofrecen un área de juegos infinita, como la natación, la construcción de castillos de arena y los deportes acuáticos.
Essaouira es una ciudad culturalmente rica, por lo que tendrá muchas cosas que visitar y otras muchas que comprar para sus familiares y amigos. Uno de los productos estrella de esta ciudad es el aceite de argán, encontrará fábricas en todo el país, pero las de Essaouira son las más famosas. También podrá perderse en los mercados inundados de colores y sabores que hacen que estos lugares sean únicos.
Póngale más magia a su estancia eligiendo una
villa de lujo o un
riad en alquiler provistos de servicio de
personal doméstico, así como
piscinas privadas para que pueda relajarse y disfrutar de sus vacaciones.